Tengo algo en el estómago que no me deja escribir.
Y es que ya me cansé de las prisas
y tengo miles de caricias que dar
pero también un nudo en la garganta
que está más acojonado que yo.
No me hables de trenes
si aún no nos hemos dejado llegar
y olvidemos los andenes
para cuando nos veamos marchar.
Háblame de amor
de cruzar semáforos en verde de la mano
porque cuando estaba rojo nos estábamos besando,
de observar Madrid desde cualquier azotea
y que sean las estrellas fugaces
quienes nos pidan deseos.
Háblame de tardes de domingo en el sofá
con cinco mariposas en cada sentido
y que la sexta sea el común
y que el común sea uno
tú conmigo,
uno.
Háblame de escapadas a valles,
de baños sin ropa en ríos congelados;
de sexo desenfrenado
detrás de puertas públicas
en los que el público no pare de gemir;
de camas que hacen desayunos
con tan sólo dos cuerpos desnudos.
Háblame de hablarnos con las manos
o tal vez de besarnos con los ojos,
de no seguir las reglas
y que sean las reglas quienes nos sigan a nosotros.
Háblame de llenos rotos
que habitan vacíos enteros;
y de vasos medio llenos
que nos lleven a querer
hacer pie en cualquier esquina.
Te hablaré en cambio de ruinas
de esquinas dobladas en las que seguir escribiendo,
de los grandes destrozos
que se hicieron con la yema de los dedos;
de querernos en pentagramas,
con medias y sin ellas
con el miedo encima de la mesa.
Te hablaré de vértigo y con él,
de precipicios preciosos
o de tu sonrisa
de valientes cobardes o de mí;
de celos mirándonos al espejo,
de reflejos que sonríen con recelo.
Te hablaré de eso de lo que todos hablan
y que pocos conocen en los tiempos que vuelan,
háblame si acaso tú lo conoces,
porque como decía Oliverio Girondo
"si no sabes volar,
pierdes el tiempo conmigo."
Hola Ari. No tengo la oportunidad de conocerte en persona, pero hace unos meses te descubrí por twitter y empecé a leer tu blog.
ResponderEliminarLa verdad, no sabría como expresar lo que haces llegar con tus palabras, lo que haces sentir con cada una de tus entradas. Es increíble que una "simple" lectura te pueda causar tantas sensaciones, y eso es algo que me encanta, que transmitas con tan poco, porque es muy importante y pocos consiguen hacerlo.
Solo quería que lo supieras, y espero poder seguir leyéndote y ver cómo vas evolucionando. Una gallega que te sigue :)
Uy, una gallega muy bonita. Es increíble que te digan cosas así, muy muy bonito, de verdad. Espero que siempre puedas seguir leyendo tanto a mí como a otros mucho más grandes.
ResponderEliminarMuchas gracias bonita, y un abrazo enorme.